Pueblos escondidos, paraisos encontrados. Existen en la Alpujarra un gran numero de poblaciones, que por sus accesos, o por encontrarse fuera de las rutas habituales, bien merecen tomar el desvio para perderse, primero por las carreteras de acceso, y despues por sus calles. Este es Mecina Fondales. Existe en este pueblo una pequeña, aunque acogedora, oferta hostelera, ofreciendo paseos de ensueño, relajacion sin necesidad de masajes o yoga, y recuperacion corporal a base de una cocina natural y consistente. Nada de mariconadas, y buenos chorizos...
Seguimos en ruta...
Casi todas las fuentes tienen su historia. Mezclando la historia y la leyenda, como esta fuente de Pampaneira, que ademas de calmar la sed, augura que solter@ no te quedaras. A algunos se les ha quitado la sed nada mas leer la sentencia de la presente...
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Pero en Granada podemos pasar del paisaje artico al desertico, y a las imagenes me remito. Esta imagen esta tomada en la comarca de los Montes Orientales, camino de Alicún de Ortega. Al fondo, entre las nubes, y aunque no lo parezca, se puede divisar la Sierra de Cazorla. Pero el terreno, en primer termino, parece mas un paisaje lunar que granadino.
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Y es como una aparicion. La nieve en la sierra le da un aire mas señorial y real al macizo motañoso que preside la vega granadina. Nieve que presagia un verano con la suficiente agua para nuestras mundanas necesidades. En verano, esta nieve descendera hacia la vega llenando todos los rios, riachuelos, acequias y demas regueros del tesoro liquido.
Seguimos en ruta...
